Llegamos a la vigésimo séptima cita de la columna “Lunes de mujeres”, que sale cada primer lunes de mes.
En las últimas citas hemos empezado a hablar de las irregularidades menstruales, y concretamente la última vez empezamos a ver las irregularidades debidas a las alteraciones del ritmo, viendo en particular el ciclo precoz desde el punto de vista de la medicina china. Y hoy me gustaría continuar analizando el ciclo retardado.
En la medicina china, se considera que se retrasa cuando la sangre aparece con al menos cinco días de retraso durante unos meses, hasta que aparece con un ritmo de 40-50 días; pero en la práctica clínica también se tienen en cuenta los retrasos de 3-4 días, sobre todo si hay síntomas que indican un desequilibrio tendencial que podría ser el preludio de desarmonías más importantes. En cambio, los retrasos que preceden a la menopausia o que siguen a la menarquia se consideran fisiológicos, sobre todo si no van acompañados de otros síntomas más específicos.
Ciclo retardado desde vacío
A menudo, el retraso se debe a una condición de DÉFICIT DE SANGRE, que puede ser constitucional o estar causada por diversos factores, como las hemorragias, un número excesivo de partos o una dieta excesiva y desequilibrada.
En este caso, la sangre es escasa, de color pálido y consistencia líquida, y puede haber un dolor sordo en el bajo vientre. La cara está pálida y amarillenta, puede haber mareos, palpitaciones, insomnio, nerviosismo. Será importante evitar las actividades que supongan un sobreesfuerzo para el cuerpo y debiliten aún más el Bazo; y preferir los alimentos de sabor dulce que nutren la sangre y apoyan al Bazo, como la carne de pollo, los mejillones y las patatas, pero evitar los sabores dulces tóxicos, como el azúcar, ya que pueden aumentar la deficiencia del Bazo.
O bien, otra condición es el DÉFICIT DE YIN, que puede ser constitucional o estar causado por largas enfermedades, partos o estrés emocional que agotan tanto el yin como el jing de los Riñones.
En este caso la sangre es escasa, pero de color brillante y de consistencia normal o acuosa; a veces puede ser espesa y tener pequeños coágulos. Otros signos y síntomas que pueden aparecer son: enrojecimiento de los pómulos, oleadas de calor, sudores nocturnos, sequedad de garganta y boca, calor en las palmas de las manos y las plantas de los pies, mareos, zumbidos en los oídos, agitación, insomnio. En este caso será importante reducir el estrés y la irritación emocional, y llevar una vida más regular y descansada. Y como cuando el yin está en déficit el yang está en exceso, tendiendo a secar los líquidos, es bueno beber lo suficiente y preferir alimentos que contengan agua, como la fruta y la verdura, y que sean refrescantes, como la carne de conejo y la cebada.
Por último, otra condición es el DÉFICIT DE YANG, que puede estar presente desde el nacimiento o producirse como resultado de largas enfermedades, actividad sexual excesiva o trabajo extenuante que comprometen el yang de los Riñones.
En este caso el flujo es generalmente abundante, pero en algunos casos también puede ser normal o escaso; la sangre es de color oscuro pálido y de consistencia fluida. Hay una sensación de frío y dolor en el bajo vientre con el deseo de aplicar calor y presión; a menudo el dolor y la sensación de frío se extiende a la región lumbar y a las rodillas. También hay apatía y debilidad, la orina es abundante y clara, y las heces tienden a estar mal formadas. En este caso será importante descansar y evitar el frío, así como preferir alimentos que calienten, como la ternera y el cordero, o que tonifiquen el Riñón, especialmente el yang del Riñón, como las gambas, la anguila y las nueces.
Ciclo retardado desde pleno
Una forma de ciclo pospuesto por la plenitud es la condición de LLENO DE FRÍO, a menudo debido a la exposición al frío externo durante la menstruación o después del parto, o debido al consumo prolongado e intenso de alimentos y bebidas frías, o a la ingesta de sustancias medicinales de naturaleza fría.
En este caso el flujo es escaso o normal, de color oscuro y consistencia densa con coágulos, acompañado de dolor en el bajo vientre que empeora con la presión y mejora con el calor. Hay una sensación de frío, especialmente en las manos, los pies y el abdomen, y un deseo de calor; la tez es blanca azulada y, fuera de la fase menstrual, puede haber abundante leucorrea. Es importante cubrirse adecuadamente y, si es necesario, calentar la zona abdominal; evitar los alimentos y bebidas frías, prefiriendo los alimentos calientes, pero también es bueno evitar los alimentos crudos y los de naturaleza fría y fresca, como la carne de caballo, el pepino, los berros, el trigo, los brotes de soja, la lechuga, la berenjena, la cebada, el tomate, el apio, la soja verde.
Otra condición es el ESTANCAMIENTO DE QI, que es quizás la causa más común en Occidente, ya que las mujeres suelen tener una intensa actividad psicofísica diaria y están sometidas a una prolongada estimulación emocional.
En este caso, el flujo es escaso o normal, de color oscuro y consistencia algo densa, con posibles pequeños grumos, distensión y dolor en el bajo vientre que no se alivia con la presión. Puede haber frustración e irritabilidad, ganas de suspirar y tensión en los pechos. Será importante controlar primero el aspecto emocional y luego mejorar la dieta, evitando los alimentos grasos y fritos o difíciles de digerir, los alimentos ácidos (como los cítricos y los tomates) y los que generan humedad (como los azúcares, las levaduras, las harinas, la leche, los zumos de frutas y el queso). Pero también será importante realizar una actividad física regular, para facilitar la libre circulación del qi.
Por último, otra condición es el ESTANCAMIENTO DE FLEMA: en este caso el qi del Bazo es muy deficiente, alterando el metabolismo y formando así flema húmeda que se acumula en el fondo y retrasa la salida de la sangre; la flema se ve favorecida por una dieta con predominio de alimentos grasos y dulces que no pueden ser metabolizados adecuadamente, y afecta generalmente a las mujeres obesas.
En este caso el flujo tiende a ser escaso o normal, de color ligeramente claro porque está mezclado con flema, lo que le da una consistencia espesa y a veces grumosa. Hay opresión en el pecho y abundantes catarros, secreción bucal, a veces náuseas, vómitos y mareos. Será muy importante eliminar los alimentos grasos y dulces, así como las bebidas gaseosas y el alcohol; preferir los alimentos cocinados para facilitar la digestión y aumentar la actividad física para movilizar las flemas y facilitar la circulación.
Como siempre digo, es importante que cada mujer preste atención a su propia ciclicidad y a la calidad y cantidad de su flujo menstrual, porque cuantos más indicios tengamos, más fácil será entender en qué caso estamos. Aunque, evidentemente, además de todas estas indicaciones, un terapeuta Tuina puede ciertamente hacer un diagnóstico más detallado y correcto; y combinando las indicaciones anteriores con tratamientos de Tuina o, eventualmente, con el automasaje de ciertos puntos, la situación puede regularizarse más rápidamente, restableciendo el flujo correcto de qi y sangre en el útero.
Como escribió Alexandra Pope, una de las profesoras que tuve la suerte de conocer en mi camino,
“Seamos mujeres u hombres, la ciclicidad rige nuestras vidas. Hay ciclos vitales que duran un día entero (circadianos), otros que duran más de un día (infradianos) y otros que ocurren varias veces en un día (ultradianos). No respetar estos ritmos puede provocar estrés. Todos los que han trabajado en turnos de noche saben que, a la larga, el cuerpo se ve gravemente afectado, la diferencia horaria les obliga a poner su reloj biológico al revés y el insomnio puede arruinar todo el día.
Imagina que tu médico te dijera que ignores tu ritmo circadiano, que no duermas por la noche y que sigas hasta el colapso. Este comportamiento no sólo crearía un problema de desorden en la sociedad, sino que sería una locura para su salud. Esto es lo que básicamente les ocurre a las mujeres cuando se les dice que ignoren el ritmo de su ciclo menstrual.”
Ahava, Francesca Zangrandi
PD. La próxima cita de esta columna será el primer lunes de abril, pero, mientras tanto, si deseas mantenerte actualizada sobre los diversos artículos que publico en el blog, puedes suscribirte al boletín en la página web www.quintadimensione.net, poner “Me gusta” en la página Facebook Quinta Dimensione – Francesca Zangrandi, seguirme en mi Instagram https://www.instagram.com/francesca_quintadimensione/ o puedes suscribirte al canal de YouTube Francesca Quinta Dimensione. Y si crees que este artículo pueda interesar a alguien que conoces, puedes compartirlo. Muchas gracias!