Hoy es luna nueva en Piscis. Esta lunación cae en la fase del comienzo de la primavera, cuando la fuerza no utilizada, acumulada en profundidad, estalla afuera; cuando en la naturaleza ya se pueden vislumbrar los primeros brotes, la posibilidad de renacer.
El signo de Piscis es el último signo del zodiaco y se encuentra en la brecha entre el invierno y la primavera, entre las últimos alientos fríos y los primeros rayos cálidos del sol; representa tanto el principio como el final, la realidad y la visión, el espíritu y la materia. La conciencia, que en Acuario se había expandido a la dimensión comunitaria, ahora en Piscis nos sumerge en el inconsciente para redescubrir la unidad individual y aprender a confiar en nuestra voz interna.
Este aún no es el momento de plantar las semillas de nuestros proyectos, lo haremos en el signo de Aries; pero los procesos creativos comienzan en un estado de letargo, por lo que este es un momento importante para entender qué semillas queremos plantar.
Es importante que nos preguntemos quiénes queremos ser en el futuro, pero es importante hacerlo desde un punto de vista emocional: ¿cómo nos sentimos con respecto a lo que hacemos? ¿Por qué lo hacemos? ¿Qué propósito tenemos ahora? ¿Qué queremos cambiar en nuestra vida? ¿Por qué queremos cambiar? ¿Cómo nos hace sentir imaginar que ya hemos hecho este cambio?
No solamente el Sol y la Luna están en el signo de Piscis, sino también Neptuno; y también tenemos Mercurio retrógrado en Piscis, por lo que el elemento Agua está muy involucrado.
El elemento Agua se caracteriza por la capacidad de cambio y la capacidad de disolver cualquier barrera y división; es el último elemento en términos de sucesión y representa nuestro lado más sensible, el lado emocional, que también es el que nos permite crecer y evolucionar.
Cuando Mercurio está retrógrado, pueden ocurrir malentendidos, situaciones frustrantes, retrasos y problemas financieros, por lo que es un momento en el que es mejor no hacer nada de lo que podamos arrepentirnos y, en cambio, tomarnos el tiempo para descansar y entrar en contacto con nuestras emociones, nuestra interioridad, el inconsciente, porque cuando estamos totalmente presentes para nosotros mismos, estamos en contacto con nuestras pasiones, nuestros talentos, nuestra verdad.
Y por fin, desde el viernes pasado, 1 de marzo, Venus dejó el signode Capricornio para ingresar en Acuario. Venus es el planeta del placer y, por lo tanto, concierne a todo lo que nos hace sentir bien, nos atrae y nos satisface; y esto va más allá de la opinión o el juicio de los demás, porque nos lleva a lo que realmente satisface nuestra necesidad, un instinto, un deseo, incluso haciéndonos actuar para conquistar lo que verdaderamente desea nuestro corazón.
Por lo tanto, diría que esta luna nueva es bastante intensa a nivel emocional, y todo lo que plantemos en esta lunación nos acompañará al equinoccio de primavera, cuando alcance su máxima expansión con la luna llena.
Feliz luna nueva, Francesca Zangrandi