Mañana habrá luna llena en Acuario y madurará el ciclo de seis meses que comenzó con la última luna nueva en Acuario, que por cierto fue la primera luna nueva del año el 24 de enero.
En ese momento, concientes o no, estábamos ocupados sembrando nuestras intenciones durante los siguientes seis meses, y muy probablemente nuestras intenciones estaban relacionadas con la afirmación de nuestra autenticidad y la manifestación de nuestra verdadera esencia, de nuestra originalidad.
Ahora, con la luna llena en Acuario, nuestras intenciones comenzarán a manifestarse, y tenemos la oportunidad de hacer una especie de presupuesto, evaluando los resultados obtenidos en los últimos meses y decidiendo qué dirección tomar ahora.
Esta luna es reveladora, tanto el Sol como la Luna están en el momento de su máximo esplendor: la Luna llena es el momento de máxima expansión e iluminación, cuando se cosechan los frutos; el Sol está en Leo, su signo.
Leo es el signo de la autenticidad, nos empuja a dar lo mejor de nosotros, a expresar nuestros talentos, a irradiar nuestra luz, a sacar el coraje de ser nosotros mismos. Es el signo que, más de todos, nos hace darnos cuenta de quiénes somos, que nos pone en contacto con nuestro origen, entendiendo que somos divinos, que como nosotros no hay nadie más, que somos únicos. Y nos empuja a sacar a luz esta singularidad y originalidad.
Y esta luz de Leo se combina con la transparencia de Acuario, pidiéndonos que revelemos lo que somos, que demostremos de una manera nueva quiénes somos a nivel personal, pero al mismo tiempo que encontremos una familia social que nos permita ser totalmente nosotros mismos en el grupo, en el colectivo (Acuario es el signo de la hermandad y necesita crear su propia tribu a su alrededor).
Entonces, en cierto sentido, esta luna nos está diciendo que este es el momento de despertar la conciencia, tanto personal como colectiva. Es hora de hacer brillar nuestra luz, recordándonos, sin embargo, que el sol que debe brillar es el de nuestro corazón: el sol del corazón (formado por nuestros talentos, los dones que tenemos que dar a los demás) es nuestra medicina, y ahora nos pide poder manifestarse libremente en todo su esplendor.
Feliz luna llena, Francesca Zangrandi
