Mañana nos acompañará la Luna Nueva en el signo de Géminis, es decir, el Sol y la Luna estarán en conjunción en el mismo signo, dándonos la posibilidad de manifestar la energía de Géminis de forma renovada.
La etimología de la palabra «géminis» proviene del latín «geminus», que hace referencia a la pareja de hermanos gemelos, pero también podemos distinguir la raíz griega «gamos», que hace referencia a hierogamos, el matrimonio entre masculino y femenino, recordándonos que sólo la unión de estas dos partes en nuestro interior nos llevará a estar completos.
Cada luna nueva nos da la oportunidad de empezar algo nuevo que se desarrollará durante los próximos seis meses, y los eclipses actúan como catalizadores, aceleradores que nos empujan a crecer. Esta luna nueva viene acompañada de un eclipse solar anular: los astros están alineados en el Nodo Norte, por lo que este eclipse nos alejará de lo que se ha vuelto habitual y cómodo para nosotros, para abrirnos a nuevas perspectivas y nuevos puntos de vista.
El signo de Géminis es el signo de la comunicación y nos conecta con el poder de la palabra, ayudándonos a expresar quiénes somos y qué queremos, por lo que esta lunación nos pide coherencia entre lo que pensamos, sentimos y hacemos. El regente de Géminis es Mercurio, el planeta que está más cerca del Sol y se mueve más rápido, y que en el mito representa a Hermes, el mensajero de los dioses que ponía en comunicación con el Olimpo a los diferentes reinos, por lo que podemos decir que Mercurio es el planeta de la mente, del pensamiento, del habla, de la comunicación.
Mercurio está en conjunción con el Sol y la Luna, a sólo un grado de distancia, y además está en movimiento retrógrado. Cuando está retrógrado, nos pide que vayamos más despacio y nos tomemos el tiempo necesario para revisar algunas cosas y escuchar el mensaje que nos traen, y como ahora está en Géminis, nos pide que prestemos atención a cómo nos ponemos en contacto con nosotros mismos y con los demás, qué formas utilizamos para comunicarnos interna y externamente.
Sin embargo, los tres están en cuadratura con Neptuno en Piscis, por lo que en realidad la mente puede estar muy confundida: Neptuno nos recuerda que no hay fronteras, todo es uno, y nos enseña que para avanzar debemos soltar el control y fluir con la corriente, con la vida; poco a poco va dejando caer las certezas y nos deja en un estado de aparente caos precisamente para permitirnos dar un salto cuántico en el plano de la conciencia.
Para los indios americanos, la Madre Clan de este ciclo lunar es Cuentacuento, la preservadora de hablar desde la experiencia personal, que nos enseña a hablar en verdad, comunicando desde el corazón; nos muestra la fe que necesitamos para abrirnos camino a través de nuestras confusiones, y nos enseña a ser en la vida tanto alumnos como maestros.
Y en la Rueda del Año, aunque poco a poco nos vamos acercando al solsticio de verano y a Litha, de momento seguimos en la estación de Beltane y una de las diosas que se celebra en esta época del año es Rhiannon, cuyo nombre significa Gran Reina; es la guardiana de nuestros auténticos «sí» y «no», la que nos ayuda a definir cuáles son nuestros límites saludables, a ser más auténticos a medida que nos adentramos en nuestras profundidades.
Así que esta lunación no sólo nos invita a conectar con nuestra auténtica voz, sino también a hacer una buena limpieza de nuestros pensamientos y creencias. Por lo tanto, tenemos la oportunidad de sanar nuestra palabra y utilizarla amorosamente para expresar y verbalizar lo que necesitamos para vivir nuestra vida y nuestras relaciones, porque las palabras que utilizamos tienen un tremendo poder, no sólo las palabras que decimos, sino también las que pensamos: cada palabra que pronunciamos es la conexión directa entre el pensamiento y el plano material, ¡y cada palabra crea nuestra realidad! Por eso es importante prestar atención a nuestros pensamientos y a lo que decimos.
Como dijo Sigmund Freud: «Las palabras fueron originalmente hechizos, y la palabra ha conservado hasta hoy gran parte de su antiguo poder mágico. Con las palabras un hombre puede hacer feliz a otro o desesperarlo, con las palabras el profesor transmite sus conocimientos a sus alumnos, con las palabras el orador atrae al público con él y determina sus juicios y decisiones. Las palabras suscitan afectos y son el medio general por el que los hombres se influyen mutuamente».
¿Cuáles son nuestros pensamientos recurrentes?
¿Qué energía tienen nuestros pensamientos?
¿Cómo nos hacen sentir?
¿Qué palabras utilizamos con frecuencia?
¿Qué vibración tienen las palabras que utilizamos?
¿Cómo nos hacen sentir?
¿Qué palabras utilizamos cuando conversamos con los demás?
¿Utilizamos palabras que nos nutren de belleza o palabras que perturban o incluso destruyen?
¿Qué es lo que nos gustaría decirle al mundo sobre nosotros?
¿Qué es lo que queremos contar al universo sobre nosotros y qué es lo que forma parte de nuestra antigua identidad y ya no queremos contar?
¿Cómo podemos llevar nuestra palabra a una nueva vibración?
Feliz luna nueva, Francesca Zangrandi
- ¡Mañana a las 20:00 hora española tendremos una CEREMONIA DE LUNA NUEVA ONLINE: el encuentro será gratuito, y si te interesa asistir avísame!