En la madrugada empezará un nuevo ciclo lunar en el signo de Virgo: Sol y Luna estarán conjuntos en este signo de Tierra que busca la integración individual, tanto física como mental, emocional y espiritual. De hecho, ha pasado por todas las etapas de los signos anteriores, es decir, por la valentía impulsiva de Aries, la estabilidad de Tauro, la curiosidad de Géminis, la necesidad de arraigo de Cáncer y la creatividad de Leo, y ahora busca reorganizar todo lo que ha adquirido para preparar las bases que le permitirán salir al mundo y colaborar con el exterior. Para Virgo, todo debe integrarse, encajar, mezclarse: su tarea es consolidar todas las diferentes etapas de la experiencia en un todo orgánico que funcione, preparando el terreno para los siguientes signos del zodiaco, que representan las relaciones con los demás, la sociedad y el mundo.
Virgo es un signo móvil, nos habla de energías que cambian (se acaba una estación y ya empezamos a percibir la siguiente) y representa el cierre de un ciclo y el comienzo de otro: la tierra fértil de Tauro ha llegado al final de su ciclo, y ahora la necesidad ya no es cosechar los frutos para alimentarse (típico de Leo), sino conservar para la estación invernal.
Es el momento de proteger la cosecha, por lo que para Virgo el control es esencial: las energías están en una fase descendente, el futuro es incierto, por lo que es bueno entender la situación a fondo y encontrar una pauta para seguir metódicamente, porque Virgo necesita que todo esté perfectamente en orden.
Virgo ama el orden, necesita organizar y ordenar el exterior para ordenar también su interior, su mente (está regida por Mercurio); por eso nos invita a la concreción y a prestar atención a las rutinas diarias, porque al fin y al cabo es lo que hacemos día a día lo que crea nuestra realidad y nuestra vida. También nos pide que incluyamos tiempo en nuestras rutinas diarias para dedicarnos a nosotros y a nuestro bienestar, porque al fin y al cabo, este signo también nos habla del cuerpo y de la salud.
No es casualidad que rija el abdomen y el intestino: las medicinas tradicionales siempre han considerado que el intestino es fundamental para nuestra salud, y para la Medicina Tradicional China, el intestino separa lo puro de lo impuro; de hecho, Virgo disecciona, analiza, separa, examina, clasifica para conservar sólo lo verdaderamente importante.
Esta luna nueva será bastante intensa: los dos luminares están en conjunción con dos asteroides, Medusa y Vesta, y esta última para la astrología chamánica es la regente del signo de Virgo. Además, los dos luminares están en oposición a Saturno en Piscis, lo que nos recuerda que es hora de asumir responsabilidades y cambiar hábitos que no nos hacen bien. Plutón ha vuelto a entrar por última vez en el signo de Capricornio y Venus está haciendo conjunción con Lilith y el Nodo Sur.
Además, Urano acaba de comenzar su retrogradación: es el planeta del cambio y la innovación, el que nos invita a utilizar una lente diferente para pensar en nuevas soluciones a viejos problemas; pero cuando está retrógrado, Urano lleva la vibración del cambio hacia dentro y nos pide que cambiemos nuestro paisaje interior. La energía de Urano actúa sobre viejos pensamientos, puntos de vista desfasados y emociones que han seguido su curso, por lo que tiene el poder de ayudarnos a convertirnos en alguien que antes ni siquiera podíamos imaginar. Pero con Urano, lo mejor es abandonarse y fluir con elegancia mientras tengamos la opción.
Esperemos lo inesperado y recordemos que todo esto está pensado para ayudarnos a ser dueños de nuestra magia.
Feliz luna nueva, Francesca Zangrandi